Esta conversión se realiza de forma totalmente electrónica; implica modificar el mapa de combustible para que el usuario pueda conducir con cualquiera de los dos combustibles en cualquier proporción sin intervención alguna por su parte.
El combustible E85, o superetanol, está compuesto por un 85 % de etanol y un 15 % de gasolina. Se obtiene principalmente de cereales como el maíz.
La composición puede variar según la estación del año o la gasolinera.
En invierno, por ejemplo, el contenido de gasolina será mayor para facilitar los arranques en frío.
Tenga cuidado, especialmente en Francia, donde la normativa se ha vuelto más laxa que antes, y las compañías petroleras pueden utilizar una mayor cantidad de etanol, lo que puede causar ciertos problemas, sobre todo durante los arranques en frío.
Es importante tener en cuenta que un vehículo con electrónica antigua desarrollará problemas más rápidamente que uno de nueva generación, aunque es posible realizar los ajustes necesarios.
07 julio 2025
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22 octubre 2025